Mi experiencia reciente con giffgaff

Cuando llegué a Londres, como muchos, escuché hablar maravillas de giffgaff. La idea de no tener contrato y pagar solo lo que usas parecía perfecta. Durante mucho tiempo estuve satisfecho con sus tarifas y planes flexibles, pero después de varios años mi percepción ha cambiado por completo, y quiero compartirlo para que otras personas lo sepan antes de decidir.

El problema del “payback”

Giffgaff funciona en parte gracias a la comunidad: sus propios usuarios recomiendan el servicio, responden dudas en el foro y ayudan a que la empresa crezca. A cambio, ofrecen un sistema de recompensas llamado payback. La teoría es simple: cuanto más contribuyes, más dinero acumulas en tu cuenta.

El problema es que ese dinero no es realmente tuyo hasta que lo reclamas dentro de los plazos y siguiendo sus reglas. Si decides dejar giffgaff, todo lo que generaste, incluso durante años, se lo quedan ellos. Muchas personas ni siquiera llegan a reclamar sus ganancias. En otras palabras, trabajas gratis para una empresa que se beneficia de tu esfuerzo y, si un día te vas, pierdes todo lo que aportaste. Personalmente, me parece una práctica injusta y deshonesta.

Teléfonos y préstamos

Giffgaff también vende teléfonos y ofrece la opción de pagarlos a plazos mediante préstamos. Al principio puede parecer conveniente, pero después de comparar precios descubrí que en otras plataformas y operadores se pueden encontrar los mismos móviles más baratos y con mejores condiciones. Es decir, no es la opción más económica como muchos piensan.

Lo bueno que aún tiene

Sus tarifas siguen siendo flexibles, sin contratos obligatorios y con la facilidad de gestionar todo desde la aplicación. En ese sentido, como operador para usar datos y llamadas básicas, funciona bien.

Mi valoración final

Al principio, giffgaff me parecía una gran alternativa para ahorrar dinero y evitar contratos largos. Pero tras vivir la experiencia completa, especialmente con su sistema de payback, mi opinión cambió. Nadie debería aportar trabajo, recomendaciones y tiempo a una empresa para que, al final, se quede con el dinero generado. Tampoco veo gran ventaja en comprar teléfonos con ellos cuando existen opciones más baratas fuera.

Mi consejo: úsalo solo como cliente si te conviene, pero no trabajes ni recomiendes esperando una compensación justa, porque puede que nunca la recibas. Y compara precios antes de comprometerte.