El museo de la prisión Clink: Una visita obligada para los amantes de la historia medieval

Parte del encanto de Londres es ese pasado oscuro que algunos de sus museos encierran. Uno de ellos es la prisión Clink en donde sus paredes esconden historias escalofriantes de criminales de la Edad Media.

El Museo Clink es una prisión de la ciudad. Fue construida en 1144 y se usó hasta 1780. Es una de las pocas cárceles que se han conservado en Londres y es una de las atracciones turísticas más populares de la ciudad. Se encuentra en el centro de Londres, cerca de la Catedral de San Pablo.

Durante más de 400 años, la prisión albergó a muchos criminales famosos, como los piratas del siglo XVII.

El museo fue fundado con el objetivo de contar la historia de la prisión y de los prisioneros que pasaron por ella.

El museo está dividido en seis secciones, cada una de las cuales se centra en un aspecto diferente de la vida en la prisión. La primera sección se centra en la historia de la prisión, mientras que la segunda sección se centra en la vida de los prisioneros. La tercera sección se centra en la rehabilitación de los presos.

El Clink es uno de los museos más peculiares de Londres y sin duda alguna uno de los más interesantes. También es un lugar de visita popular para los estudiantes de historia y sociología.

El museo cuenta con una serie de exhibiciones sobre la vida en la cárcel, la historia de la justicia penal en Inglaterra y el sistema carcelario actual.
El Museo Clink de Londres es una visita obligada para aquellos que estén interesados en la historia de la cárcel y la justicia penal.

Aquí te dejo algunas de las mejores razones para visitar el museo:

• Londres es una ciudad llena de historia y tradición, el Museo Clink es una prueba de ello. Se trata de una prisión que se usó durante siglos para alojar a delincuentes y prisioneros políticos.
• El museo está ubicado en el distrito de Southwark, uno de los más antiguos de Londres.
• El Museo Clink ofrece a los visitantes una idea de cómo era la vida en la prisión durante los siglo XIV – XVII.
• Se pueden ver cámaras de tortura, celdas y objetos que pertenecían a los prisioneros.
• En la visita guiada por un ex-preso, conocerás anécdotas de su propia experiencia en la prisión, lo que hace que la visita sea muy interesante.
• Además, el museo está muy bien conservado y se pueden ver muchos objetos originales de la época.

Comprar entradas para la prisión de Clink es sencillo. Si deseas ahorrar, te sugiero comprar tus boletos con anticipación. El coste promedio por entrada está entre £7 a £10. También hay descuentos familiares y actividades para niños mayores de 7 años. Para comprar, ve al siguiente enlace:

Entradas para el Museo de la prisión de Clink de Londres.