La Navidad es tan popular como Mr. Bean en Gran Bretaña y este episodio de los 90 lo cuenta todo.
Es el 25 en la mañana; ha llegado la Navidad y Mr. Bean se despierta para apresurarse a abrir los regalos que él mismo preparó. Teddy, su pequeño oso de peluche es el primero en recibir nuevos ojos y después Bean se regala así mismo un par de calcetines.
Cuando llega el medio día, recuerda que tiene una invitada especial y con mucho entusiasmo se pone a rellenar un pavo enorme. Al terminar y a punto de meterlo al horno, sucede algo inesperado…
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